Gazapos web: lo que NO se debe hacer

Si por casualidad llega alguien a tu web y se encuentra esto, es posible que nunca vuelva. Los errores de diseño web en páginas corporativas son frecuentes debido a una mala gestión por parte del técnico y al ahorro por parte de la empresa. Aquello de que lo barato sale caro. Por eso, os traeremos el gazapo web de la semana con el fin de denunciar estas malas prácticas y defender un diseño web de calidad.

Publicar una web sin tener ni las secciones definidas

Al rico relleno de Lorem Ipsum

En esta primera ocasión os mostramos no uno sino dos errores de diseño web muy graves. La empresa X -la llamaremos así para no desprestigiar su imagen.- nos ha mandado una invitación para darle a me gusta en su página de Facebook. Al visitar su muro y querer informarnos más sobre la empresa, vemos que tienen página web. Cuál es nuestra sorpresa cuando encontramos que han lanzado la web sin estar completamente publicada y en plena campaña de recolectar me gustas. Muy mal.

 

Esto ocurre cuando se quiere acabar antes, si quiera, de empezar. La paciencia es fundamental y hay que seguir una estrategia de comunicación o, si lo preferís llamar, simplemente, unos pasos. Tampoco hace falta que sea complicada, el sentido común nos dice que no podemos desvelar nuestra página web hasta que esté bien bonita y completa. Y, menos aún, aventurarnos a una campaña de publicidad y dirigir al usuario o posible cliente a una web que más bien le echará para atrás y tendrá claro que la mejor opción es no comprar y olvidarse de tu empresa. Mal. Fatal.

error diseño web

 

Además han rellenado -sí, rellenado- los textos de la página web con Lorem Ipsum. Se trata de un texto en latín que permite ver el efecto visual del diseño aunque no tengamos el texto correcto. Según dicen, ya se usaba desde tiempos inmemoriales y es muy buena opción cuando no dispones de material con que maquetar la web. Sin embargo, sólo es permisible utilizarlo mientras se está desarrollando la web y nunca una vez abierta al público.

Da muy mala imagen. Una sensación de dejadez y de no haber tomado la decisión acertada. No sólo tu producto tiene que ser bueno, también la forma de ofrecerlo, la atención al cliente y  los detalles. El usuario que visite tu web, a estas alturas del siglo XXI, ya se las sabe todas. Busca una compra online o información de tu empresa y, posiblemente, sea la primera impresión que tenga de ella.

Hay que tomarse en serio la web de una empresa. ¿La oficina o comercio no los tienes patas arriba verdad?